Se ha cerrado septiembre con el precio del mercado eléctrico más alto para este mes desde el año 2008.
Hay que recordar que en 2008 hubo un incremento acelerado del precio del petróleo que afectó al alza también los precios del gas, y el precio del carbón y de los derechos de CO2 también estaban en máximos. Ahora estamos viviendo algo parecido. Pero uno de los elementos que puede ayudar a reducir el precio del mercado eléctrico es la aportación de la eólica a la cobertura de la demanda eléctrica.
Cuanto más viento ‘empuja’ las palas de los aerogeneradores, más baja el precio del mercado. Obviamente, esto ocurre si se mantienen el resto de factores iguales: si por ejemplo aumenta la demanda en consumo más que el aumento de generación con el viento, la aportación eólica no podrá contrarrestar completamente el aumento de precio del mercado por la mayor demanda.
Para hacernos una idea de la diferencia entre un día ‘ventoso’ y otro ‘calmado’ en el mercado eléctrico español, no hay más que tomar el día con el precio más bajo (que fue también el más ventoso) y el del precio más alto en septiembre: el 24 y el 28 respectivamente. Hay que recordar que septiembre es el mes del año en el que históricamente hay menos viento, por lo que es más fácil ver la diferencia entre un día con mucha aportación eólica y uno con poca.
Como se puede ver en el gráfico, la diferencia en el precio medio diario entre un día y el otro es de 10,2 €/MWh. ¿Cuál es la razón de la diferencia entre uno y otro? Casi exclusivamente la aportación eólica: 9,2% de la cobertura de la demanda en el día más caro y un 27% de aportación en el día más barato. A pesar de que la demanda eléctrica fue un poco más alta el día que hubo viento (+1,7%), el incremento en la generación eólica fue suficiente para cubrir ese aumento de la demanda y sustituir en casi un 30% la necesidad de generar con centrales térmicas fósiles. Y el resultado es que el precio del mercado fue un 13,4% inferior en el día con más viento respecto al día con el precio más alto.
Fuente: REE, OMIE y elaboración AEE
Además de tener precios en el mercado eléctrico más bajos cuando hay una mayor aportación eólica, también hay una menor emisión a la atmósfera de CO2 y contaminantes clásicos, por lo que al beneficio económico se añade el medioambiental y para la salud. Doble beneficio gracias a una energía autóctona.
Fuente: Blog de AEE