La Fundación Feniss dará soporte técnico a los partidos del 26J para erradicar la obsolescencia programada

La Fundación Feniss (Fundación Energía e innovación Sostenible sin obsolescencia programada) da un paso más en su lucha contra la obsolescencia programada. Feniss dotará de soporte técnico a todos aquellos partidos políticos que concurren en las próximas elecciones del 26J y que se han comprometido a impulsar una ley contra la obsolescencia programada.

Partidos que han incluido una propuesta en contra de la obsolescencia programada

Tras la jornada impulsada por la fundación Feniss el pasado mes de mayo en Barcelona, algunos de los partidos políticos se comprometieron a incluir en sus programas una ley en contra de la obsolescencia programada similar a la que ya existe en Francia. Dichos partidos son: PSC-PSOE, Podemos, ICV, CDC, Recortes cero-grupo Verde y ERC. Tras este compromiso, la fundación anuncia un soporte técnico para impulsar la normativa.

Detección de componentes diseñados para fallar

El apoyo técnico de Feniss constará de diferentes puntos. Por un lado, se ayudará a detectar aquellos componentes diseñados para fallar en un momento determinado. En la fundación se dispone de acceso a cualquier componente que se fabrique por lo que, de ese modo, se podrá valorar. Por otro lado, se centrará en las carcasas de los productos. Se determinará su fiabilidad, en cuanto a la facilidad para su reparación y ecualización, así como de cualquier pieza o conjunto de piezas del equipo.

Software que programe el fin de vida útil del producto

Del mismo modo, otra de las líneas en las que se trabajará desde la fundación es la localización de algún tipo de software que determine la vida útil del producto o sirva para paralizar el equipo. Del mismo modo, se determinará si se han incorporado elementos o piezas que dificulten una reparación rápida y eficaz. Y por último, se detectará si el producto contiene componentes destructivos unos de otros.

Auditorias y reciclaje

Otras de las acciones que se llevarán acabo es la realización de auditorias para comprobar si el producto ha sido diseñado para calcular su vida útil de forma artificial para incrementar las ventas o se podía haber fabricado con mayor durabilidad. También se establecerá si dispone de fácil reparación o actualización y si los materiales utilizados son los más adecuados para su reciclaje final.