Cabo Verde se unió hoy al Acuerdo sobre las medidas del Estado rector del puerto. Su presidente, Jorge Carlos Fonseca, ha hecho entrega personalmente de los documentos de ratificación del tratado por parte de su país durante una visita a la FAO en Roma.
El Director General de la FAO, José Graziano da Silva definió esta ratificación como "una excelente noticia", e invitó al presidente a un evento que tendrá lugar el mes que viene en Roma para celebrar la entrada en vigor del primer tratado internacional destinado específicamente a luchar contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.
"Cabo Verde actúa de forma responsable y se une a los esfuerzos de la comunidad internacional, encabezada por las Naciones Unidas y la FAO, para combatir prácticas que limitan el acceso sostenible a recursos que son importantísimos para todo el mundo y, en especial, para un país-archipiélago como el nuestro”, dijo Fonseca.
Nada menos que 60 países firmantes del acuerdo (PSMA, por sus siglas en inglés) participarán en el evento especial del 11 de julio, que coincide con la reunión del Comité de Pesca en la sede de la FAO, afirmó el Director General de la FAO. La FAO elaboró el tratado y empezó a promover su adopción en 2009.
El PSMA, que obliga a todos los buques de pesca a permitir que los inspectores suban a bordo cuando se detienen en los puertos extranjeros, entró en vigor a principios de este mes después de que más de 25 países - que van desde Cuba y Estados Unidos a Mozambique y la Unión Europea, actuando en nombre de sus 28 miembros - depositasen sus instrumentos de adhesión.
Graziano da Silva señaló la disposición de la FAO para apoyar el sector pesquero de Cabo Verde, afirmando que la colaboración de la agencia con el país experimenta grandes progresos. Los proyectos actuales incluyen iniciativas para hacer frente a la desertificación, impulsar la reforestación y reforzar los esfuerzos para promover la gestión de los recursos marinos y la Economía Azul.
Apoyo para contener el zika
Graziano da Silva también ofreció la asistencia técnica de la FAO para contener el virus Zika, una enfermedad transmitida por mosquitos que se ha detectado en el país, donde el clima húmedo y cálido es ideal para la proliferación de los insectos.
"La FAO es responsable de la prevención, no de la gestión de la enfermedad en si", dijo. "La prevención es fundamental", afirmó, y agregó que el uso de insecticidas en las áreas urbanas puede no ser suficiente para erradicar los mosquitos.
La FAO y la Organización Internacional de la Energía Atómica tienen un programa conjunto para apoyar a los países miembros en el control de plagas de insectos, que ha desarrollado una técnica que utiliza insectos estériles para combatir este tipo de vectores de enfermedades.
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