Mejoras que refuerzan su equipamiento en seguridad preventiva y diversión de conducción. Distinguido desde su lanzamiento por EuroNCAP como el más seguro de su categoría. Reverse Automatic Breaking, hasta ahora exclusivo para el Forester, ya disponible también en el XV. id:65308
Desde el lanzamiento de su segunda generación a finales de 2017, el Subaru XV ha obtenido importantes premios de seguridad a nivel mundial, alcanzando 199,7 puntos sobre 208 posibles en el Programa de Evaluación de Coches Nuevos de Japón (JNCAP) en 2017 y 118,8 puntos sobre 126 posibles en 2018-19. En ambos casos se trata de la puntuación más alta de la historia. En Europa el Subaru XV alcanzó la máxima calificación general de cinco estrellas en el Programa Europeo de Evaluación de Automóviles Nuevos (EuroNCAP) y fue galardonado como el mejor de su categoría en 2017.
Siendo la seguridad el principal argumento de compra de la marca japonesa, Subaru ha decidido reforzar el completísimo paquete de seguridad del XV incorporando la frenada de emergencia marcha atrás (Reverse Automatic Breaking) a los acabados Executive Plus, tanto de la versión ecoHYBRID como de la variante 1.6i gasolina. Este dispositivo fue novedad en Subaru con el lanzamiento del nuevo Forester y no es nada común en vehículos del segmento C.
Los cambios en el XV no quedan ahí, pues además de ligeros cambios en el diseño de los grupos ópticos, en el color del cuero en la versión Executive Plus o en la inclusión del nuevo color Magnetite Grey -que sustituye al Dark Grey-, ahora las levas en el volante se incluyen de serie desde el acabado Sport Plus tanto en la versión ecoHYBRID como en la variante 1.6 i gasolina, ambas equipadas con cambio de variador continuo CVT Lineartronic. De esta forma, el conductor puede adecuar la marcha a su estilo de conducción y a las peculiaridades del trazado, pudiendo subir y bajar las 7 marchas prefijadas desde las levas del volante en pos de una conducción más deportiva si así lo desea.
EyeSight con frenada de emergencia marcha atrás en acabado Executive Plus
El sistema Reverse Automatic Braking (RAB) es capaz de detectar un obstáculo en la parte del vehículo, y frenar para evitar o mitigar los daños del impacto. Al circular marcha atrás, los sensores montados en el parachoques trasero detectan obstáculos y avisan al conductor con advertencias acústicas y en la pantalla. Una advertencia de aproximación se muestra simultáneamente con una imagen de la cámara de visión trasera en la pantalla de navegación. Cuando el sensor detecta un objeto, aparece un mensaje de advertencia y una imagen de advertencia de distancia translúcida similar a una pared se muestra en la pantalla. Esto hace que sea más fácil para el conductor determinar visualmente la posición del objeto. Si existe una alta posibilidad de colisión, el sistema frena de manera autónoma para ayudar a evitar o reducir la gravedad de la colisión.
EL RAB es la guinda a un completísimo equipamiento de seguridad preventiva EyeSight, que incluye de serie en todos los acabados Función de frenada pre-colisión, Función de asistencia a la frenada pre-colisión, Control de crucero y de crucero adaptativo, Función de aviso de salida del carril, Función de permanencia en el carril, Función de control del acelerador, Función de aviso de derrapado y Función de aviso de avance del coche delantero. El sistema de seguridad preventiva EyeSight emplea dos cámaras HD estereoscópicas con sensores CMOS montadas a ambos lados del espejo retrovisor interior para monitorizar las condiciones del tráfico. Básicamente es como contar con un par de ojos extra que asisten al conductor en condiciones críticas, previenen o mitigan las consecuencias de un posible accidente ante eventuales distracciones y ofrecen una conducción más segura y confortable.
Subaru lleva 30 años trabajando sin descanso en el desarrollo y evolución del EyeSight, un sistema responsable de una asombrosa reducción del 61% en los accidentes que acaban en heridas o fallecimiento del conductor, acompañantes y peatones, y del 84% los accidentes por alcance entre coches frente a los modelos anteriores no equipados con esta tecnología. Las últimas mejoras se están llevando a cabo de la mano de la tecnológica estadounidense Xilinx, cuyos microprocesadores de 16 nanómetros dotarán de mayor precisión al control de crucero adaptativo, a la función de mantenimiento de carril y a la frenada pre-colisión.
La gama XV parte de los 22.850 € (campañas incluidas) con el motor 1.6 en acabado Sport, mientras que la variante híbrida en acabado Sport Plus tiene un precio de 30.750 € (o 250€ al mes), en todos los casos con el sistema de seguridad preventiva EyeSight y tracción integral permanente de serie.