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Confortable, amplio, eficaz, dentro y fuera de la carretera

Land Rover Discovery Sport 2.0, 180CV

Land Rover Discovery Sport 2.0, 180CV
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Por Mariano García Viana
domingo 03 de julio de 2016, 23:52h

Concebido como sustituto del Freelander 2, el Discovery Sport, se ha convertido en uno de los modelos de Land Rover más personales y polifacéticos de la gama, pues es cómodo para la utilización en carretera y muy eficaz fuera de ella, contando además con un espacio interior envidiable.

El Discovery Sport se identifica claramente como un Land Rover, como luego veremos en las descripciones de la carrocería e interior, pero introduce un diseño orientado, específicamente, a crear una clara diferenciación entre las diversas familias que componen la gama Land Rover: Lujo (Range Rover), Capacidad (Defender) y Ocio (Discovery). Efectivamente, el Discovery Sport confiere al diseño de la familia Discovery una orientación más dinámica, polifacética y funcional, además de un diseño claramente personal. Con una longitud de 4.590 mm., el Discovery Sport mide 239 mm. menos que el Discovery “normal” de siete plazas, que continúa comercializándose, mientras que su generosa distancia entre ejes de 2.741 mm. otorga un gran espacio para los ocupantes, debido a que los diseñadores de Land Rover han desplazado las ruedas hacia las esquinas del vehículo, lo que también se ha traducido en una apariencia robusta y compacta, así como en un bajo centro de gravedad.

Entre las características más distintivas cabe destacar un capó de fuerte apariencia que, junto a una parrilla frontal dividida en dos secciones horizontales con malla hexagonal, conforman uno de los rasgos más característicos de Land Rover. La carrocería en general muestra dos líneas de diseño que si bien son fáciles de apreciar a simple vista, se combinan perfectamente. Una es la parte delantera y el lateral de formas rectilíneas, aunque más suavizadas que en el Discovery “normal” y otra la trasera de forma claramente redondeada, incluso los grupos ópticos tienen esa forma. Es de destacar la fuerte protección de aluminio que se sitúa en la parte inferior del paragolpes y los grandes escapes a cada lado de ellas. Igualmente hay que señalar el alerón de generosas dimensiones que corona la igualmente generosa luneta. Sin lugar a dudas el aspecto es de robustez y da la sensación de ser más largo de lo que es en realidad.

El interior del Discovery Sport ha sido diseñado para refrendar esa concepción de vehículo para el ocio y ofrecer un espacio versátil y acogedor en el que todos los ocupantes disfrutan de la misma comodidad. Sus versátiles asientos distribuidos en una configuración 5+2, ofrecen un extenso abanico de configuraciones. Los dos delanteros son auténticas butacaspor su comodidad y además sujetan el cuerpo perfectamente. La segunda fila, puede acoger a tres ocupantes por su amplitud suficiente, pues además el respaldo de los asientos delantero presentan un contorno ergonómico para que los pasajeros de esta segunda fila puedan disfrutar incluso de más espacio para las rodillas, se aprecia claramente que los diseñadores de Land Rover han dado prioridad para ganar espacio a la altura de la cabeza, los hombros y las mencionadas rodillas. La tercera fila, escamoteable en el fondo de un maletero que con dos filas montadas llega hasta los 541 litros de capacidad de carga y con una fila sola hasta nada menos que 1.698 litros, casi como una pequeña furgoneta, pues la superficie es prácticamente plana, ya que incluso en el eje trasero multibrazo totalmente nuevo, se minimiza la intrusión de las torretas de la suspensión trasera en ese espacio de carga. Es importante también señalar que tanto la segunda como la tercera fila de asientos se pueden plegar con una sola mano. Los asientos de la segunda fila se suministran de serie con puntos de anclaje Isofix para las sillas de seguridad infantiles. De este modo se consigue minimizar las molestias que supone colocar las sillas infantiles y cambiarlas de un vehículo familiar a otro, con el consiguiente aumento de seguridad y comodidad.

El Discovery Sport proporciona una posición privilegiada al piloto que ofrece una clara visión de la carretera, a la vez que tiene al alcance la mayoría de los mandos auxiliares y el selector del cambio automatico. Todos los materiales empleados en el habitáculo son de máxima calidad y han sido diseñados para no resultar artificiales, ofreciendo esta versión probada cuero con doble pespunte en los bordes superiores del salpicadero y en las superficies de las puertas. Esto crea una sensación de calidad y discreto lujo, mientras que, por el contrario, el diseño general del salpicadero resulta bastante sencillo y con las líneas generales muy horizontales. El cuadro es tradicional con dos grandes relojes analógicos y los indicadores habituales, rodeados de un sinfín de avisadores ópticos y separados por una pantalla TFT de 5” que se encarga de facilitar información clave como el nivel de combustible, la marcha engranada, la temperatura y los modos Terrain Response®. El elemento central del salpicadero es la consola, de líneas verticales y presidida en su parte más alta por la pantalla táctil de 8”. El sencillo diseño de la consola central asegura que todos los controles están agrupados de un modo lógico. Los botones y ruedas de control, suaves al tacto, están alojados en una superficie de color negro brillante, permitiendo que el conductor pueda encontrarlos sin dificultad bajo la luz solar directa.

Para “animar” a este poderoso SUV, se estrena un excelente motor diesel de dos litros de cilindrada, el Ingenium un motor más ligero en 20 kilos que el anterior de 2.2 litros y 190 CV, pero cuyo rendimiento de 180 CV es más aprovechable en reacciones, rapidez de respuesta, economía de consumo, emisiones menores y que cuenta además con el sistema de Star&Stop, una fricción interna que se ha rebajado en un 17% respecto a la generación anterior de motores y los intervalos de servicio que han pasado de 26.000 km. a 34.000 km. Todo ello, más 4 válvulas por cilindro, 2 árboles de levas en cabeza, inyección directa common rail, turbo de geometría variable e intecooler, se traduce en un aprovechable par de 430 Nm a 1-750 r.p.m. En líneas generales el motor nos ha parecido francamente estupendo, es bastante silencioso, desde muy bajas vueltas comienza a empujar con una fuerza constante y contundente que hace muy agradable su utilización, pues además está perfectamente conjuntado con una caja de cambios automática de 9 velocidades, que se engranan con mucha suavidad aunque se quiera conducir con decisión y las relaciones se sumen una tras otra rápidamente, para sacar lo mucho que puede dar de si el coche, cuyas prestaciones se pueden resumir en una velocidad máxima de 190 km/h y una aceleración de 0 a 100 de 8,9 segundos.

El comportamiento del Discovery Sport es igualmente excelente, de entrada digamos que parece que se conduce un coche de menores proporciones y envergadura, gracias a su ligero chasis que le dota de una envidiable agilidad, así como de una serie de elementos tecnológicos que aseguran la tracción y el agarre en toda circunstancia. Se dispone del sistema de tracción permanente a las cuatro ruedas Efficient Driveline, que varia permanentemente de par entre los ejes delantero y trasero. Entre ellos el acoplamiento central tipo Haldex, que ahora pesa 44 kilogramos menos, se controla electrónicamente, lo que le permite responder al deslizamiento de las ruedas y a las demandas del conductor. En el caso de que el sistema detecte que las ruedas pierden tracción o que se está empleando un estilo de conducción más dinámico, vuelve a conectar la tracción a las cuatro ruedas en menos de 350 milisegundos. La tracción a las cuatro ruedas está conectada de forma permanente para proporcionar elevadas reservas de tracción arrancando desde parado, pero un embrague desconecta por completo los componentes mecánicos de la tracción total, el árbol de transmisión, los ejes de transmisión posteriores y el diferencial posterior y los embragues cuando la velocidad se mantiene estable por encima de los 35 km/h. De este modo se reducen considerablemente las pérdidas por fricción y, por consiguiente, el consumo de combustible y las emisiones de CO2. Precisamente en ese sentido, también se cuenta con un sistema que que permite mantener, de forma automática, una velocidad constante (entre 2 y 30 km/h) en conducción por campo. Este dispositivo se denomina ATPC, del inglés All Terrain Progress Control, dispositivo que además puede cambiar la respuesta de la dirección, del acelerador, de la caja de cambios, del reparto de fuerza entre las ruedas, del sistema de frenos y del eficaz control de estabilidad. Mediante una rueda se pueden elegir diversos programas de tracción, como son: General, Hierba-Gravilla, Nieve, Barro, Surcos y Arena. Como se puede adivinar conducir el Discovery Sport fuera de la carretera, de pistas o sea campo a través, no plantea ningún problema, pues además se cuenta con el control de descenso de pendientes, que mantiene la velocidad constante aplicando de manera autónoma los frenos y también con el sensor de vadeo, que informa de la profundidad de aguan en la pantalla de la consola.

Como se puede intuir con todo lo descrito el Discovery Sport, va más allá que un SUV al uso habitual, es un auténtico todoterreno por su eficacia fuera del asfalto. Pero también como turismo, cuenta con un equipamiento supercompleto de elementos de ayuda a la conducción y al incremento de la seguridad y el confort, pues entre otras cosas se puede regular la dureza de la amortiguación, avisador de cambio de carril, BLIS de ángulo muerto, apertura del portón al pasar el pie por debajo del paragolpes trasero, asistencia de aparcamiento sin tocar el volante, cámara trasera……..

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