Gran parte del éxito empresarial se debe a la gestión óptima de los presupuestos financieros. Desde su planificación hasta su control, permiten detectar, analizar y corregir las desviaciones que se producen en cualquier área de la organización, ya sea en el apartado de clientes, proveedores, gastos, ingresos o cobros y pagos. Los mecanismos de control presupuestario –apuntan desde Datisa- facilitan una visión integral de la evolución de la actividad empresarial.
El control de presupuestos financieros, siendo una de las tareas que más ventajas aporta para garantizar la correcta toma de decisiones, sigue habiendo muchas pequeñas y medianas empresas que pasan por alto su actualización. Un sistema financiero de planificación y control presupuestario funciona de modo bidireccional siendo los datos que aporta uno, la información de la que se nutre el otro. Y es, precisamente este hecho lo que proporciona a las organizaciones la capacidad de corregir las desviaciones que se detectan para reorientar las estrategias en función de los objetivos establecidos.
La planificación y el control de presupuestos financieros forma parte del sistema de gestión empresarial y su puesta en marcha debe abordarse desde la perspectiva de unos objetivos y previsiones reales y eso implica que los datos que se manejen deben estar actualizados.
Planificar no es la única manera de establecer previsiones y, lo que es más importante, una hoja de ruta para alcanzar los objetivos establecidos, o bien, para modificar –si fuera necesario- las desviaciones que puedan producirse entre lo previsto y lo conseguido. Pero, es en realidad, una de las maneras más sencillas y económicas de poner al alcance de las pequeñas y medianas empresas, la información que necesitan para tomar decisiones con mayor rapidez y, sobre todo, con más garantías de éxito.
Disponer de un ERP que facilite la planificación presupuestaria aportará los beneficios propios de automatizar dicha tarea, pero además, permitirá que la información financiera este coordinada con todos los miembros y departamentos de la organización. Es decir, el área comercial proporcionará información al área financiera sobre ventas y su impacto en la facturación. Sucederá lo mismo con los departamentos de producción o de almacenamiento o de tesorería. Con ello, será más fácil impulsar el trabajo colaborativo y, como explica Isabel Pomar, directora comercial y de marketing de
Datisa, “remar todos en la misma dirección”.
La planificación financiera de presupuestos es un elemento estratégico para ayudar a las pequeñas y medianas empresas a alcanzar el éxito porque, como dice Isabel Pomar, “no sólo permite adelantarse a los acontecimientos antes de que éstos sucedan y tomar las decisiones más acertadas, sino que permite adaptarnos a entornos cambiantes como los que vivimos”.
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