Con su característica línea de familiar aventurera mucho más remarcada, también conserva y aumenta su carga tecnológica y sobre todo su nivel de seguridad, tanto que se convierte en el más seguro de todos aquello que han pasado las pruebas Euro NCAP. id:82313
Si lugar a dudas con solo ver el aspecto del Outback, se le adivina como un coche sólido, resistente y amplio en su habitáculo, cualidades que, junto con otras, se han confirmado a lo largo de la prueba. Esta sexta generación es la del primer Outback construido sobre la plataforma Global de Subaru, SGP que aporta una mejora significativa a la rigidez de la carrocería y el chasis (resistencia a la flexión lateral frontal +90%, rigidez torsional +70%, rigidez de la suspensión delantera +70%, rigidez del bastidor trasero +100%), por lo que además de ofrecer la ya mencionada seguridad, también exhibe un mayor confort para los ocupantes y una alta calidad de rodadura en todo tipo de terrenos, ya sea en carretera, como en las aventuras fuera de ella.
A pesar del paso del tiempo, desde su nacimiento en 1995, el Outback ha conservado su línea familiar, pero naturalmente ha evolucionado, ha crecido y sobre todo en esta última generación ha adquirido un aspecto mucho más campero y más parecido a un SUV. Ello es debido sobre todo a la incorporación de elementos protectores de plástico y a unas voluminosas barras en el techo. El frontal luce la típica calandra hexagonal de la marca con fondo negro y dos gruesas barras paralelas agujereadas que la atraviesan y en medio de ellas el generoso logo de la marca. El paragolpes es prácticamente todo en plástico negro incluyendo la entrada de aire inferior y los cubículos de los faros antiniebla. Esta gran zona plastificada se prolonga por los pasos de rueda, también en generoso tamaño y continua por los bajos de las puertas, pero adquiriendo unas quebradas, robustas y originales formas. Los faros principales son de led, ofrecen una buena iluminación y alrededor de ellos, con formas triangulares de ilumina la luz de día.
Toda la zona acristalada esta enmarcada en cromado, único detalle “brillante” del diseño, pues incluso los retrovisores exteriores son de color negro. En la trasera, como es lógico, el paragolpes vuelve a ser de plástico negro, incluido el difusor de aire inferior. Hasta su borde llega la apertura de del portón de maletero, con lo que es fácil de adivinar, como así es, que al abrirlo queda un hueco muy grande, que facilita la carga y descarga de bultos. Los grupos ópticos en forma más o menos de C, tienen buenas dimensiones y mezclan en su luminosidad, los led con las bombillas incandescentes. Por su parte la luneta tiene también un buen tamaño, lo que facilita la visión hacia atrás a pesar de la no menos generosa visera que la envuelve tanto por su parte superior como en los laterales. En resumidas cuentas, un coche francamente personal, que sabe mezclar la silueta familiar con la de un SUV y desde luego distinto a la mayoría.
El interior, como es fácil de adivinar es amplio y capaz para que cinco personas viajen sin ningún problema de falta de confort, pues incluso el ocupante de en medio del asiento trasero dispone de suficiente espacio y solamente el voluminoso túnel de la transmisión a las ruedas traseras, le obligaría a perder algo de comodidad. El salpicadero, como todo el habitáculo en general, destila buena terminación, el empleo de buenos materiales y además un ajuste perfecto. Este es bicolor, con una zona oscura horizontal que lo “cubre” todo, otra clara en su parte frontal y otra también oscura, pero no tanto como la superior, en la parte inferior que engloba la guantera, una pequeña bandeja sobre esta y algunos interruptores para elementos auxiliares a la izquierda del conductor. Es de destacar, que estas dos últimas partes señaladas, horizontal e inferior, lucen unas costuras que realzan la piel sintética de la que están forradas en la mayoría de su superficie.
El cuadro dominado por dos grandes esferas digitales, para cuentavueltas y velocímetro, ofrece una pequeña pantalla que las separa, que se puede configurar y ofrecer una buena serie de datos sobre el coche, las opciones de conducción, sistemas de seguridad, etc. Si bien la información más importante es muy fácil de visualizar, otros guarismos o avisos son demasiado pequeños y están muy juntos entre ellos. En el centro de la parte frontal del salpicadero se encuentra la pantalla táctil, de 11,6 pulgadas, dispuesta en sentido vertical. Una pantalla fácil de manejar, muy intuitiva y con una buena calidad de resolución. Cuenta con el sistema de sistema de información y entretenimiento más avanzado de Subaru, pudiéndose manejar como si de una Tablet o Smartphone se tratase e incorporando Apple CarPlay y Android AutoTM para una mayor comodidad de uso. Además cuenta con el Driver Monitoring System que puede identificar al conductor y ajustar automáticamente su configuración previamente personalizada de posición del asiento, ángulos de los retrovisores exteriores y preferencias del aire acondicionado. En su parte baja se integran, también de forma táctil, los mandos del climatizador, calefacción de los asientos, luneta y retrovisores, etc. El equipo de sonido, de buena calidad, se puede manejar, además de en la pantalla y en el volante, a través de dos botones, uno para el volumen y otro para sintonizar emisoras, lo que se agradece enormemente, sobre todo este último, pues a veces en otros coches buscar una emisora determinada es casi una odisea y requiere mucha atención. En la parte horizontal de la consola se sitúan, una clásica palanca selectora del cambio automático, el freno de mano eléctrico y un hueco para pequeños objetos y los enchufes para equipos auxiliares.
Varios huecos más se reparten por distintas zonas de habitáculo, como los reposabrazos delantero y trasero, puertas, lateral de la consola, etc. Los asientos de piel sintética, resultan confortables y los delanteros sujetan muy bien el cuerpo en las curvas o maniobras bruscas. Su regulación es eléctrica y el trasero puede inclinar el respaldo. El maletero por su parte, tiene una capacidad de 561 litros, que esta muy bien y que además se puede ampliar hasta los 1.822 litros. La apertura del portón es eléctrica y se puede incluso abrir pasando el brazo por el logotipo de Subaru del propio portón. Además, se ha incorporado un sistema para lavar la cámara de visión trasera, de modo que la lente esté siempre libre de suciedad y ofrezca la mejor visibilidad posible.
El Outback de esta sexta generación monta el típico motor boxer, todo de aluminio y de gasolina, con los cuatro cilindros opuestos horizontalmente, que ahora ofrece una potencia de 169 CV a 5.000/5.800 r.p.m. El 90% de las piezas del motor están rediseñadas para un mejor rendimiento y además se cuanta con una mayor relación de compresión. El par obtenido es de 252 Nm a 3.800 vueltas. Un motor que en las zonas medias y bajas de revoluciones, se muestra bastante silencioso, pero que al subir de vueltas se deja oir sobradamente en el habitáculo. Cuenta con el Star & Stop, sistema que viene muy bien sobre todo en ciudad, pues los consumos no son muy contenidos, ya que en una utilización mixta carretera-ciudad difícilmente se baja de los 8 litros a los 100 km. Las prestaciones sin ser especialmente brillantes, si son las suficientes para conseguir una utilización alegre y hasta divertida, contando con una velocidad máxima de 195 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h de 10,2 segundos, mientras que para pasar de 80 a 120 km/h, tarda 8,7 segundos.
El nuevo modelo conserva la típica combinación de tracción integral permanente Subaru All Wheel Drive y la transmisión Lineartronic de tipo CVT. Esta caja automática de variador continuo, se ha renovado con una relación final más abierta y 8 marchas prefijadas, cuando se utiliza en modo manual y se maneja a través de las levas situada tras el volante, estando la octava de ellas pensada para una mayor eficiencia de combustible en carretera. El sistema hidráulico se ha mejorado y se ha reducido la viscosidad del aceite, lo que reduce las pérdidas de potencia en un 22% en comparación con la generación anterior. Esta combinación ofrece mejores prestaciones y un mayor control de par, mientras que la tracción AWD proporciona seguridad en todas las circunstancias, y gracias al control activo de par se mejora el comportamiento dinámico y la respuesta del vehículo en curva, mediante el frenado selectivo de las ruedas interiores y la reducción del par motor que llega a esas ruedas, al tiempo que aumenta el que se envía a las ruedas exteriores. Con todo ello es fácil interpretar que conducir el Outback es más que gratificante, no solo por la sensación de seguridad que aporta la solidez de la carrocería y chasis, sino también por la efectiva rodadura y el excelente comportamiento en todo tipo de trazado o de firme.
Las suspensiones, muy bien estudiadas, con McPherson delante y paralelogramo deformable detrás, con sus correspondientes barras estabilizadoras en cada eje, se han mostrado siempre muy eficaces, a la vez que han absorbido perfectamente las irregularidades del terreno, incluso fuera de la carretera, donde el Outback supera en comportamiento a la mayoría de los SUV, por no decir todos. Al contar con una altura con respecto al suelo de 213 mm. y unos ángulos de ataque y salida, muy favorables, supera muchos obstáculos que, con otro coche de configuración parecida, aunque sea de carrocería típicamente SUV, no puede hacerlo. El Outback ofrece también tres modos de funcionamiento del sistema de tracción: para condiciones normales, para nieve y para arena. En el modo nieve y barro se activa, además, el control de descensos de forma automática cuando el coche detecta una pendiente pronunciada. Los frenos están a la altura del coche, con cuatro discos ventilados y le detienen sin problemas ni apenas esfuerzo a pesar de los más de 1.700 kilos que pesa en vacío.
El Outback cuenta con un generoso equipamiento de serie, parte del cual esta integrado en la nueva generación del sistema EyeSight (4.0), cuyas cámaras, montadas a ambos lados del espejo retrovisor interior, presentan ahora un ángulo de visión ampliado (casi duplicado), un nuevo software de reconocimiento de imágenes y una alta resolución derivada de los sensores CMOS, . Esta nueva generación de EyeSight dispone de 11 funciones de seguridad, entre las que se encuentran las siguientes novedades: Control de crucero adaptativo avanzado, Función de permanencia en carril, Control de dirección en caso de emergencia, Reconocimiento de señales de tráfico y Limitador de velocidad inteligente y Frenada de emergencia marcha atrás. Además, el nuevo Outback incorpora a su paquete de seguridad la tecnología de reconocimiento facial de Subaru denominada Driver Monitoring System, que alerta al conductor en caso de distracción o fatiga. Su completo equipamiento de seguridad incluye Detección de vehículos traseros Subaru (SRVD), Monitores de vista múltiple (frontal, trasera y lateral) para reducir los puntos ciegos del vehículo y el Recordatorio de uso de los asientos traseros.