En 1989 el modelo por entonces denominado Tipo, consiguió para Fiat el galardón de Coche del Año en Europa, un vehículo del que se fabricaron cerca de 2 millones de unidades en 7 años. El recuperar esta denominación para su nuevo modelo no ha sido un hecho de simple nostalgia por parte de Fiat, sino la demostración de una clara intención de conseguir, no ya iguales cotas de éxito que su antecesor, sino superarle incluso en popularidad y dimensión comercial. Por ello no es de extrañar que el esfuerzo de la marca italiana haya dado como resultado un producto lleno de virtudes y cualidades dentro de un segmento sumamente competitivo, pues la mayoría de las marcas disponen igualmente de excelente modelos.
El Tipo es un coche funcional y práctico y para corroborar esta afirmación tiene distintos tipos de carrocería, el compacto cinco puertas, el capaz Station Wagon y el más clásico de tres volúmenes o Sedán. Precisamente de este tipo de carrocería hemos llevado a cabo la presente prueba; un modelo de tres cuerpos que denota claramente su procedencia italiana, pues no en vano ha sido diseñado y desarrollado por el Centro Stile de Fiat en colaboración con uno de los centros de investigación y desarrollo del Grupo FCA, fabricándose en una de las más modernas y mejores fábricas de automóviles del mundo situada en Bursa (Turquía). Visualmente, las líneas generales de éste tres volúmenes son sumamente compactas, gracias a sus estudiadas formas, aunque es más grande de lo que parece (4,54 metros de largo), lo que deja entrever un habitáculo bastante amplio, como luego veremos. El corto y redondeado morro está presidido por una original calandra que forma un todo con los modernos y generosos faros de doble óptica y que lógicamente integran la luz de día. El esculpido paragolpes integra bajo él una entrada de aire a cada lado de la cual se sitúan los faros antiniebla ya formando la “esquina” de la carrocería. Lateralmente destacan las sinuosas “hendiduras” que recorren la silueta desde delante a atrás, especialmente la que de alguna forma trata de unir los faros delanteros con los grupos ópticos traseros. La inclinación del techo, formando un arco descendente desde la mitad del coche hacia atrás, incluyendo la luneta trasera y hasta la tapa del maletero le dan un cierto aspecto deportivo. El igualmente corto maletero contribuye a ese aspecto compacto que hemos mencionado anteriormente e integra en su parte más exterior un discreto alerón aerodinámico; por su parte, los grandes grupos ópticos tienen unas originales formas que hacen inconfundible la identificación del modelo, mientras que el paragolpes, al igual que el delantero, se esculpe en la propia carrocería y en su parte baja integra los estrechos y alargados reflectores.
El habitáculo resulta sorprendentemente amplio para las dimensiones exteriores. Llama la atención nada más acceder a él, el original salpicadero, que quizás muestre demasiado el aspecto plástico como elemento principal, pero que está bien construido y con un excelente encaje entre sus distintas partes, Destaca igualmente la visera que cobija el cuadro de instrumentos se extiende hacia el centro del salpicadero y aunque con menor anchura, también acoge a la pantalla multifunción, mientras que la zona del acompañante ya queda despejada para albergar el correspondiente airbag. Las salidas de aire son de generoso tamaño, tanto las laterales como las situadas en el centro de la consola, bajo las cuales se sitúan los interruptores auxiliares y más abajo aún los mandos del climatizador.
Los asientos, de piel y tejido tiene muy buen aspecto y dejar entrever una buen duración. Los delanteros dan un confort y una sujeción correctos. Es fácil conseguir una postura de conducción cómoda por la amplitud de los ajuste del volante (en altura y profundidad) y de los propios asientos. El del conductor tiene regulación en altura y del apoyo lumbar eléctricos. El del pasajero tiene las regulaciones básicas: en longitud, en inclinación del respaldo y en altura del reposacabezas. El espacio en las plazas delanteras, como en las traseras, es amplio, en especial en lo referente a la altura libre al techo. En ese sentido hay que señalar que precisamente los pasajeros de la fila posterior cuentan con un espacio para las piernas superior al de la mayoría de sus rivales de segmento. Otro de los puntos fuertes del Tipo Sedán es el gran maletero del que se dispone que, con sus 520 litros, es capaz de albergar el equipaje de 5 personas, pudiendo además transportar objetos largos al poderse abatir el respaldo del asiento trasero en un 60/40, disponiendo además de una altura y abertura de carga que se pueden calificar como correctas y cómodas de utilización.
El Tipo Sedán dispone de varios tipos de motorización, eligiendo para la prueba la más potente que es la diesel Multijet II de 1.600 c.c., que ofrece una potencia de 120 CV a 3.750 r.p.m. y un par de 320 Nm a 1.750 r.p.m. Un motor que si bien resulta un tanto ruidoso en velocidades cortas, una vez ganada velocidad y alcanzando la de crucero, apenas se deja oir en el habitáculo, pues además éste está bien insonorizado. En cuanto a prestaciones, digamos que la velocidad máxima es de 200 km/h y la aceleración de 0 a 100 km/h de 9,7 segundos que no está nada mal. Con tampoco está nada mal el consumo medio que no ha pasado de los 4,2 litros, por mucho que hemos utilizado con decisión el coche.
Pero independientemente de estas cifras, la mayor virtud de este motor es su utilización en general, ya que en ciudad permite evitar muchos cambios de velocidad, gracias por un lado a las propias facultades de la mecánica y por otro a las bien estudiadas relaciones de la caja de cambios manual de 6 velocidades, que por cierto, tiene una utilización muy suave y precisa. Por otra parte en carretera también encontramos esa suavidad de funcionamiento lo que hace muy agradable los viajes, pues además, las suspensiones ponen su importante grano de arena positiva. Con un sistema McPherson delante con su correspondiente barra estabilizadora y con otro de rueda tirada atrás, el Tipo se sujeta perfectamente y además proporciona un alto nivel de confort a los ocupantes. Como la dirección es muy directa y permite una rápida utilización, el Tipo se muestra muy ágil en zonas viradas, pues aunque se inclina la carrocería, las reacciones son muy nobles y además los sistemas electrónicos ayudan a este sano comportamiento, además el conductor puede elegir entre dos tipos de asistencia a la dirección, la normal y la denominada “city”, ideal para ciudad y que facilita, con su aumento de asistencia, las maniobras lentas. También los frenos se han comportado perfectamente y no han mostrado signos de cansancio por mucho que se les haya utilizado.
Con respecto al equipamiento se puede calificar del muy completo pues un gran número de elementos son de serie en la terminación del modelo de la prueba Opening Plus. Nos encontramos por ejemplo con sensores de aparcamiento, con cámara de visión trasera, faros de cambio de luces automático, control de crucero, el ESC (Control electrónico de estabilidad), el ASR, el sistema que utiliza los frenos y el control motor a cualquier velocidad para optimizar la tracción, permitiendo que el coche Tipo se enfrente a superficies de baja adherencia con facilidad, el PBA Asistente de frenado de emergencia, que en caso de frenado de emergencia, el sistema aplica la máxima fuerza de frenado para lograr una distancia de frenado más corta, control de estabilidad para remolques (TSC), asistente de arranque en cuenta (HSA) y un largo etc. que completan los sistemas y elementos de seguridad y confort.
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