En línea con la nueva era que se abre de vehículos electrificados, la emblemática forma evoluciona hacia una nueva “carrocería de doble punta de flecha”, como se puede ver en el Lexus RX de nueva generación y en el RZ eléctrico. La parrilla de doble punta de flecha ha sido una característica inconfundible de Lexus desde que se estrenó en el prototipo LF-Gh en 2011, la inspiración de la cuarta generación de la berlina ejecutiva GS que se lanzó al año siguiente. Desde entonces, se ha ido adaptando constantemente en función del carácter de cada nuevo modelo Lexus, con distintos patrones de malla, dimensiones y acabados.
Ha ido evolucionando hasta convertirse en una expresión diferencial del diseño L-Finesse de Lexus, que no solo se adopta en los modelos de carretera, sino que también se incorporó en la nave espacial futurista Skyjet desarrollada para la película Valerian y la ciudad de los mil planetas, que contó con el apoyo de Lexus. También como motivo de diseño de The Loft, la galardonada sala VIP de Lexus y Brussels Airlines en el aeropuerto de Bruselas.
Actualmente, el original concepto de la parrilla es también el punto de partida para una aplicación más radical de la forma de doble punta de flecha, que la convierte en parte integral del diseño global del vehículo. El concepto de “carrocería de doble punta de flecha” forma parte del diseño de “Siguiente Capítulo” de Lexus desarrollado para el nuevo RX, donde la parrilla se reinterpreta como una unidad totalmente integrada que fluye hacia la carrocería. La sección inferior conserva un patrón de malla, mientras que la parte superior se funde con el extremo inferior del capó; el emblema de Lexus destaca en el centro del vértice superior de la doble punta de flecha.
El mismo concepto se ha aplicado al RZ 450e. Al tratarse de un vehículo eléctrico con batería, requiere menos refrigeración que uno con motor convencional, por lo que la parrilla ya no es necesaria, lo que da a los ingenieros una mayor libertad. No obstante, la forma de doble punta de flecha sigue destacando en un panel frontal central acabado en el mismo color de la carrocería. Su impacto se realza gracias al contraste del acabado de las áreas frontales en negro, la baja altura del capó y la forma más audaz de las aletas delanteras. En ambos modelos, la doble punta de flecha genera unas líneas que fluyen desde el frontal del vehículo, a través del capó y los faros, para crear un imponente y distintivo aspecto frontal, que refuerza la aspiración de definir la marca del concepto original.