Jiménez de Parga, que realizó estas declaraciones en un encuentro con periodistas, elogió el “extraordinario trabajo desarrollado por los concesionarios en este año, que ha sido uno de los más difíciles de los últimos tiempos por los problemas generados en la cadena de suministro, por la situación económica y por el impacto de la guerra de Ucrania en ŠKODA AUTO”.
Pese a todo ello, la red comercial conseguirá una rentabilidad récord en términos de beneficio antes de impuestos sobre facturación del 2,7%, más de un punto por encima del 1,6% contabilizado en 2021, y superando el anterior máximo histórico, que fue el 2,3% contabilizado en el ejercicio de 2019, antes de la pandemia. Además, está previsto que la red aumente el número de instalaciones en los próximos años para lograr una mayor capilaridad.
El máximo responsable de ŠKODA en el mercado español explicó que esta mejora de la rentabilidad ha sido posible gracias a la contención de costes y a un mix favorable de producto, con una sólida demanda de los modelos SUV, de las versiones más equipadas y de los acabados deportivos RS y Montecarlo, que suman cerca del 10% de las ventas totales.
Por otro lado, Jiménez de Parga avanzó que la marca prevé concluir 2022 con una cuota de penetración del 3% en el mercado español, igualando el hito logrado el pasado año. No obstante, a corto plazo el objetivo es alcanzar el 4% y conseguir el 5% en los próximos cinco años. “Estoy convencido de que ŠKODA tiene potencial para alcanzar el 5% del mercado y situarnos entre las diez marcas más vendidas en el mercado español”, añadió. Para ello, la firma checa cuenta con la mayor y más renovada gama de producto de su historia, en la que destacan los SUV Kodiaq, Karoq y Kamiq y el eléctrico Enyaq iV, que cuenta con una cartera de pedidos de más de 500 unidades. Además, la gama crecerá con tres nuevos eléctricos que llegarán al mercado antes de 2026.