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SsangYong Rexton D22 DTR 4x4

SsangYong Rexton D22 DTR 4x4
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Siete confortables plazas rodeadas de un excelente equipamiento

Por Mariano García Viana
domingo 11 de junio de 2023, 23:40h

Con tracción a las cuatro ruedas y suficiente potencia para superar con facilidad cualquier obstáculo, sin embargo, su altura no es excesiva y su confortabilidad excelente, así como su maniobrabilidad, por eso el Rexton está a medio camino entre un todoterreno puro y un SUV.

Desde luego el aspecto del Rexton es el de un gran SUV, poderoso y ciertamente voluminoso, pero que a la vez respira cierta elegancia en sus bien estudiadas líneas, desde luego es de los modelos de SsangYong, a lo largo de su historia en España, más conseguidos estéticamente. Y ya que hablamos de sus formas, centrémonos por ahora en ellas. Ese mencionado poderío visual, se centra sobre todo en su frontal, presidido por una gran parrilla con un contorno parecido a la Audi, pero más abultada y con una trama en forma de rombos y adornos “diamantados” en sus vértices. Sus faros full led, con cuatro focos independientes, enmarcados por la luz de día, que se convierten también en indicadores de dirección, combinan con la parte alta de la citada parrilla que, en sus laterales más bajos, lo hacen con el cubículo que integra los faros antiniebla. Dos estrechas entradas de aire adicionales, una por encima y otra por debajo de la matrícula, completan un frontal ciertamente elaborado y, como decimos, poderoso.

Lateralmente se aprecia la considerable longitud del modelo, casi cinco metros (4.850 mm.), asi como esa continuación de aspecto sólido que respira el diseño. Los abultados pasos de rueda, están todavía más señalados con unas formas que los recorren en su parte superior, sobre todo los posteriores, ya que dichas angulosas formas comienzan en la mitad de la puerta trasera y se prolongan hasta el inicio de los grupos ópticos traseros. Toda la superficie acristalada esta enmarcada por una línea de color aluminio, que se engrosa al final de la pequeña tercera ventanilla que, al reducir su tamaño, permite un pilar trasero ancho y fuerte para proteger el enorme maletero que contiene, como ahora veremos, los dos asientos abatibles de las plazas sexta y séptima.

Las fuertes llantas de cinco elaborados radios, son de 18” que quizás a la vista de la gran superficie de chapa que se ve lateralmente hubieran quedado mejor con un tamaño algo mayor, pero en fin eso son ya leves apreciaciones, para un diseño general acertado, que se completa con una trasera que luce unos grandes pilotos, con tecnología led, que se prolongan por el portón del maletero y los laterales de la carrocería. Al final de dicho portón, ya en el paragolpes propiamente dicho, se sitúan los estrechos indicadores de dirección, tan bajos que, si el coche que va detrás esta cerca, situación habitual en ciudad donde las distancias son cortas, prácticamente no los ve hasta que no frenamos para hacer un giro. Una extraña “manía” de muchos diseños de SUV o todoterrenos de origen coreano, el situarlos tan bajos que hasta la suciedad de días lluviosos o al circular por terrenos embarrados, dificultan claramente su visión, cuando se podían perfectamente incorporar a los grupos ópticos principales. El mencionado portón, de accionamiento eléctrico y con una generosa luneta, permite un cómodo acceso al maletero y fácilmente desde él, abatir o restaurar verticalmente el respaldo de los asientos de la tercera fila. En el final del paragolpes dos falsas salidas de escape, alargadas y cromadas, rematan una parte posterior tan acertada como el resto del coche.

El habitáculo es realmente grande y confortable. Hay espacio suficiente para viajar cómodamente siete personas, aunque las dos de la tercera fila tengan menos espacio para las piernas, pero los de la segunda, que pueden ser perfectamente tres, aunque la del centro irá algo más incómoda por la propia concepción del asiento, no por falta de sitio. El salpicadero, sin ser especialmente original, si puede presumir de tener todo muy a la mano y con una distribución lógica de los mandos e interruptores de las distintas funciones.

El cuadro es una pantalla de 12,3”, que se puede configurar según las necesidades o gustos del conductor. Fácil de interpretar y de ver a la luz de día, no así la pantalla central de 8 pulgadas, empotrada en el propio salpicadero y escoltada por dos grandes salidas de aire, pues su luminosidad no es muy alta que digamos y con la luz de sol apenas si se puede ver. Aunque dispone de varias funciones, no tiene navegador y deja esta función para que se haga a través del móvil, pues es compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Más abajo se sitúan en un bloque todos los mandos del climatizador, muy al alcance la mano y sin necesidad de entrar en la pantalla de infoentretenimiento como en otros modelos. Al más abajo aún un par de teclas activan la calefacción o ventilación de los asientos delanteros.

Ya en la parte horizontal de la consola, delante y al lado de la clásica palanca del cambio automático, encontramos dos huecos con sus correspondientes persianas, que ocultan los posibles objetos que allí se alojan, como el móvil, llavero, etc. Detrás de dicha palanca, agrupados, se sitúan, las teclas del freno de mano electrónico, rodeado de las del Drive Mode, ayuda sonora al aparcamiento, etc. Ya casi al final de la consola y antes del apoyabrazos central, se establece la rueda que selecciona la tracción a las ruedas traseras, a las cuatro y la reductora. Los asientos de Nappa son muy cómodos, sujetando bien el cuerpo los delanteros, que tienen regulación eléctrica y ofreciendo acomodo para tres personas los de la segunda fila, mientras que los dos de la tercera, aunque dos adultos tendrían que llevar las piernas algo encogidas pues no encontrarían hueco para meter los pies debajo de la fila anterior, por espacio apenas si se rozarían. El maletero, con dos filas de asientos desplegadas, la más habitual, tiene una capacidad de 641 litros, con las tres filas, 236 y con dos de ellas abatidas, nada menos que 1.806 litros, como el de una pequeña furgoneta.

Aunque el Rexton pesa algo más de dos toneladas, la motorización con la que esta equipado se muestra lo suficientemente eficaz como para proporcionarle unas respetables prestaciones como ahora veremos. Dicho motor es un diésel de cuatro cilindros y 2.157 c.c., capaz de proporcionar 202 CV de potencia y un par de 441 Nm entre 1.600 y 2.600 r.p.m. Su funcionamiento es muy agradable, bastante silencioso para ser de gasóleo, incluso en velocidades cortas, rápido en las recuperaciones y subiendo de vueltas siempre con constante progresión, pues además las relaciones del cambio de ocho velocidades, están bien estudiadas y no hacen perder “fuerza” en las subidas de relaciones. Pero además de ese excelente funcionamiento, el consumo es realmente reducido para las características del coche, 7 litros en utilización mixta y sin forzarle claro. Esta es una de las características más sobresalientes de esta mecánica. Por su parte, las prestaciones principales son, velocidad máxima de 185 km/h, la aceleración de 0 a 100 km/h, es de 11 segundos y la recuperación de 80 a 120 km/h de 8,3 segundos.

El comportamiento del Rexton es muy sano en todo tipo de trazados, es decir, tanto en carretera, como en ciudad, como fuera del asfalto. Ello es debido a que, al contrario que otros todoterreno (Pues no olvidemos que el Rexton tiene esa doble personalidad SUV-Todoterreno), los dos trenes de tracción disponen de suspensión independiente a base de paralelogramos deformables con sus correspondientes barras estabilizadoras. El resultado es que en carretera se muestra muy seguro a pesar de su elevado peso, en ciudad sorprende por su maniobrabilidad y fuera de la carretera, ayudado por la tracción integral e incluso si se tiene que aplicar la reductora, tiene una eficacia muy reconfortante y que anima a la aventura. Por su parte, los frenos, con las cuatro ruedas de discos ventilados, son igualmente eficaces, si bien hemos notado un recorrido inicial del pedal “en vacío”, que necesita un cierto “aprendizaje” para no asustarse si la frenada es imprevista. Una vez superado ese periodo, la verdad es que no hemos tenido ningún problema de fatiga ni pérdida de eficacia.

Por último, señalar el completo equipamiento con el que esta equipada esta versión del Rexton. Entre los que cabe destacar, el control de descenso, apertura eléctrica del portón, alarma del cambio involuntario del carril, aviso de posible colisión y frenada de emergencia, cámara trasera, control de velocidad adaptativo, detector de vehículos en el ángulo muerto, etc. Y ya para terminar resaltar la buena relación calidad precio para un coche de esta tamaño, potencia y practicidad.

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