La planta de fabricación en Newark, Reino Unido, especialista en rodamientos y sistemas de movimiento lineal NSK, ha implementado un sistema de recolección de agua de lluvia que reducirá el consumo de la red pública en casi 200.000 litros al año. id:83781
Basado en el sistema Stormsaver StormStation que se monta sobre el suelo, la instalación se centra en un edificio grande que aloja una fundición con una gran superficie de tejado y dos bajantes de gran diámetro. Un ingeniero especializado en automatización y sostenibilidad de NSK en Newark diseñó válvulas electrónicas que se instalaron en el interior de las bajantes para que desviasen el agua de lluvia hacia un depósito de 10.000 litros (aproximadamente del tamaño de un contenedor de transporte).
El depósito está ubicado en el jardín central de las instalaciones de Newark, a la vista de los empleados como emblema de aprovechamiento y diseño. Además de un sistema de filtrado integral, también se ha instalado un sistema de iluminación UV para eliminar bacterias y esporas de hongos. El agua limpia se presuriza mediante dos bombas y se envía a tres bloques de baños en el sector de triturado de las instalaciones. Ello representa el 40% de las instalaciones de baños disponibles para el personal de fabricación, que atiende a alrededor de 140 empleados en un patrón de tres turnos.
Puesto en servicio en abril de 2022, el sistema de recolección de agua de lluvia evita la necesidad de descargar casi 200.000 litros de agua potable cada año.
Otra parte del proyecto será el papel que representan estas instalaciones como banco de pruebas para medidores inteligentes. Este sistema de medición, que se instalará próximamente, medirá la entrada y salida de agua, así como el consumo de electricidad. La medición más amplia y precisa de los consumos de las instalaciones se implementará más adelante a lo largo del año.
Otro aspecto importante de la instalación implica la proximidad del lugar de trabajo (menos de 1 km) al río Trent. Todos los edificios nuevos en el área, especialmente centros de producción, están sujetos a la gestión del agua debido a la posibilidad de inundaciones locales. Si NSK quisiera construir un nuevo edificio en sus instalaciones de Newark, tendría que contar con sistemas destinados a la prevención de inundaciones. Esto en general se interpreta como un sistema para acumular agua, que es exactamente el papel del nuevo depósito de agua de lluvia. Con esta idea en mente, la instalación de depósitos adicionales en las plantas de producción ayuda a reducir el flujo de agua a nivel local, lo que es beneficioso para todos en la región.
Tal es el éxito del proyecto que podría convertirse en el modelo para otras plantas de NSK en Europa. Newark ya ha compartido detalles de los componentes del sistema, la inversión de capital involucrada y el ahorro conseguido. Se espera recoger más datos después de la introducción de los medidores inteligentes.
En el futuro, el sitio continuará introduciendo iniciativas ambientales, incluyendo baños de baja descarga y calefacción e iluminación de bajo consumo, todo ello a medida que la compañía continúe con su agenda global en apoyo de una sociedad más sostenible.