La creación de la Zona de Libre Comercio Continental Africana ampliará las oportunidades comerciales dentro y fuera del continente africano. id:75695
El arranque oficial de la Zona de Libre Comercio Continental Africana (AfCFTA ) en 2021, que persigue consolidar a largo plazo el mayor bloque comercial del mundo en términos de países participantes, ampliará las oportunidades comerciales dentro y fuera del continente africano. 36 países han ratificado ya el acuerdo, aunque solo 11 han validado los planes de acción necesarios para su aplicación. De hecho, ocho meses después de su entrada en vigor, sólo Egipto, Ghana y Sudáfrica han establecido la infraestructura y los procedimientos aduaneros necesarios para comerciar en el marco del AfCFTA.
De acuerdo con el último estudio difundido por
Crédito y Caución, las tendencias proteccionistas de algunos países, la falta de infraestructuras, la incertidumbre política y la debilidad de las finanzas públicas y el sector bancario son los principales obstáculos a los que se enfrentará la implementación del acuerdo. No obstante, la aseguradora de crédito espera que la mayoría de las economías africanas se beneficien en última instancia del AfCFTA, sobre todo en lo que respecta a la eliminación de las barreras no arancelarias. Si se aplica plenamente, podría impulsar el potencial del continente africano, creando oportunidades para las empresas locales y extranjeras. En el caso de España, el comercio con el continente africano se limita al 5,9% de sus exportaciones, destinadas principalmente a Marruecos, seguido de Argelia, Egipto, Sudáfrica y Nigeria.
El AfCFTA pretende eliminar los aranceles sobre la mayoría de los bienes y servicios, liberalizar el comercio de servicios clave y abordar los obstáculos no arancelarios para el comercio interior. El objetivo final es tener un mercado único con libre circulación de mano de obra y capital. En cuanto al comercio de bienes, el plan es que en los próximos cinco años los aranceles se reduzcan a cero para el 90% de las mercancías. Hay una excepción para los países menos desarrollados, que tienen un plazo de diez años para adaptarse. Los aranceles de las mercancías sensibles, como azúcar, vehículos de moto y textil, se liberalizan en un periodo más largo. Algunos países pequeños, el llamado grupo de los siete, reciben un trato especial: se les permite liberalizar menos bienes y tienen un periodo más largo para reducir los aranceles. Respecto a los servicios, el plan inicial se centra en cinco sectores de servicios prioritarios: financiero, transporte, comunicaciones, servicios empresariales y turismo.
La aplicación progresiva de AfCTA No sólo aumentará el comercio intrarregional, que ahora apenas supone el 17% del total, sino que apoyará el comercio con el resto del mundo, atraerá inversiones extranjeras directas, desarrollará cadenas de suministro regionales y acelerará el crecimiento del PIB. Crédito y Caución prevé que las economías relativamente abiertas y diversificadas con vínculos comerciales establecidos sean las más beneficiadas por su aplicación. Esto se aplica a economías como Sudáfrica, Marruecos o Túnez y centros comerciales regionales como Senegal, Kenia y Costa de Marfil.