La compañía chocolatera ha llevado a cabo un plan de migración de energía eléctrica a fotovoltaica, reafirmando así su apuesta por el medioambiente. ID: 86589
El 5 de junio es ya una fecha reconocida en la sociedad por la celebración del Día Mundial del Medioambiente, un hito en el que se ponen de manifiesto las necesidades que alberga el medioambiente para su mantenimiento y preservación. Cada vez son más entidades, organizaciones y corporaciones las que abogan por introducir prácticas sostenibles entre sus máximas empresariales, y un gran ejemplo de ello es el caso de Paccari que ha abogado por la sostenibilidad desde su nacimiento en 2002.
Son muchas las prácticas e iniciativas que ha puesto en marcha Paccari en pro de garantizar la preservación de un medioambiente saludable para las generaciones venideras. Entre estas, destaca la reciente migración de la energía eléctrica hacia la energía solar, consiguiendo que el 75% del consumo de energía necesaria para el buen funcionamiento de su planta de 3.000 m2 y sus oficinas proceda del sol.
La energía fotovoltaica es una de las consideradas como limpias y renovables. Limpias porque no producen emisiones de Dióxido de Carbono ni otros gases contaminantes, por lo que el uso de este tipo de energía incentiva la disminución de forma drástica los gases de efecto invernadero. También es limpia porque los residuos que generan son mínimos. Además, este tipo de energía en un país como Ecuador en el que la radiación solar es constante a lo largo del año presenta numerosas posibilidades en cuanto al ahorro -también- económico.
Pero esta no es la única iniciativa que Paccari ha llevado a cabo con el objetivo de reducir sus emisiones de CO2, puesto que también a nivel exportación han realizado un plan de simplificación y optimización de sus envíos orientado hacia la reducción del consumo de combustible aéreo, por lo que actualmente priorizan los envíos por transporte marítimo frente al aéreo.
El propio cultivo de cacao también beneficia la reducción en la producción de Dióxido de Carbono, ya que estos árboles, todas las noches, fijan el CO2 de la atmósfera. Además, otro de los factores que sitúa a Paccari como una empresa baja en emisiones de Dióxido de Carbono es la firme decisión de prescindir de la leche de vaca en sus chocolates. Solamente el proceso de producción de leche de vaca genera hasta el 60% de los gases de efecto invernadero.
Esta suma de actividades ha hecho posible que en tan solo 12 meses la producción de sus chocolates haya experimentado una reducción de 188,89 toneladas de CO2. Pasando de 1,51 toneladas de CO2 por tonelada de producto en 2020 a 0,96 toneladas de CO2 en 2021, según avala el estudio de "Gases de Efecto Invernadero-GEI" (Sambito) bajo normas ISO 14064-1:2019 e ISO INTE B5. Desde sus inicios en 2002, han conseguido reducir hasta en un 43% las emisiones de Dióxido de Carbono.
Todo esto, ha llevado a Paccari a alcanzar el
estado de Carbono Neutralidad, la cual la avala como entidad comprometida con el cambio por un entorno más limpio. Desde el comienzo de la andadura de Paccari, no ha hecho nada más que llevar a cabo prácticas que la posicionan como empresa referente en sostenibilidad por su modelo de negocio, recibiendo numerosas certificaciones que demuestran su buen hacer. Uno de los reconocimientos más prestigiosos lo recibió en el año 2017, pues fue
reconocida como empresa BCorp que la acreditaba como compañía de gestión sostenible e impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente.