Si las economías se reabren, pese al mantenimiento de la distancia física (por decisión política o personal), el crecimiento podría repuntar con fuerza, pero no así el empleo. id:59574
En ese caso, los bancos centrales no tendrían otra opción que mantener o incluso intensificar su política monetaria sumamente flexible actual. ¿Se trata de una mala noticia? En realidad, no, ya que el aumento del «dinero de los bancos centrales» ha elevado a nuevos máximos las valoraciones de los activos.
Bajista a corto plazo
Observamos claramente la aparición de ciertos riesgos bajistas de los mercados a corto plazo. Una corrección que podría deberse a las noticias de las tensiones entre China y EE. UU., la escalada de la situación en Hong Kong o un rebrote de la pandemia por la reapertura de las economías. Además, estamos atentos a los persistentes problemas importantes e inestabilidad política en Estados Unidos. Sin embargo, aun teniendo en cuenta todos estos riesgos, no es nada seguro que puedan frustrar la vuelta a la media de los activos de riesgo a medio plazo, respalda a nuestro parecer por cuatro factores:
- Un contexto de posicionamiento global en la renta variable todavía débil.
- Una intervención rápida y flexible de los bancos centrales ante los problemas de financiación de las empresas.
- Un cambio estructural en el entorno de liquidez y tipos de interés.
- Una recuperación económica esperada, alentada por la continua relajación del confinamiento.
Desde este punto de vista, la selección de activos (sectores, estilos, regiones geográficas) será clave, más que el peso de los activos de riesgo, para la rentabilidad de los próximos meses.
La respuesta, en nuestra estrategia de inversión de este mes de junio.
Sigan teniendo cuidado.