El tipo de préstamo depende del lugar donde se encuentra el terreno a comprar y el uso que se dará. El préstamo para adquirir un terreno es diferente del préstamo para la construcción y se diferencian básicamente por el plazo estimado en que se realizará la edificación.

Si se desea comprar un terreno y comenzar a construir inmediatamente, es necesario solicitar un préstamo para la construcción que está específicamente destinado a facilitar los proyectos que ya se encuentran planeados y listos para dar inicio a las obras.

Cuando se busca concretar la compra de un terreno pero no se desea empezar a construir de inmediato, la mejor opción es solicitar un préstamo para terreno o lote. Estos préstamos pueden ser de tres tipos: para terrenos sin desarrollar, para terrenos sin mejoras y para terrenos mejorados.

En general, un préstamo para terreno funciona de manera similar a una hipoteca estándar. Si se le aprueba este tipo de préstamo, su prestamista le proporcionará fondos para comprar el terreno elegido. Luego los pagará, con intereses, durante los próximos años o décadas.

Sin embargo, calificar para un préstamo de tierra puede ser más difícil que obtener una hipoteca regular, porque representa un mayor riesgo para los prestamistas. Como resultado, es posible que se exijan al prestatario más condiciones, garantías y justificar para qué se pretende usar la tierra.

Los prestatarios deberán proveer de los detalles de la propiedad que darán a la entidad prestamista una idea de los riesgos que implicaría el préstamo. Una vez que se han tenido en cuenta todos los factores, se pueden emitir las tasas y obligaciones del préstamo para lote.

Las tasas de interés de este tipo de préstamos tienden a ser más altas que las de las hipotecas estándares, pero un buen puntaje crediticio y una baja relación deuda-ingreso pueden reducir su costo.

Financiar una compra de terreno para su posterior desarrollo implica un nivel más elevado de riesgo que no siempre atrae a los prestamistas. Sin embargo, dependiendo de las características del terreno y cómo se planee usarlo así como la estimación del plazo para concretar las obras, la solicitud de crédito podrá obtener un guiño favorable por lo que te proponemos anticipar los siguientes factores.

Antes de pedir un préstamo para comprar un terreno y construir

Antes de solicitar el préstamo es importante tener en claro los objetivos, las condiciones y estrategias que determinarán la compra y la posterior edificación de nuestro proyecto. Para ello puedes analizar y responder a los siguientes puntos:

1. ¿Cuál es el uso que se dará al terreno?

La compra de un terreno puede tener objetivos muy diversos y es necesario que tengas en claro qué uso le darás. Si buscas construir una casa o darle un uso agrícola o bien hacerlo como inversión orientará la búsqueda así como las características del préstamo que debes solicitar.

2. ¿Cuál es el presupuesto máximo estimado?

Aquí debes considerar no sólo el precio del terreno sino también los costos de construcción, mejoras, impuestos, etc., tomando en cuenta cualquier imprevisto o gasto extra que debas realizar.

Lo mejor es empezar haciendo un comparativo de arquitectos, visitando dos o tres despachos y comparando precios y equipos.

También puedes buscar asesoramiento para desarrollar estrategias que reduzcan los costos a la hora de desarrollar tu proyecto. Por ejemplo, priorizar el uso de materiales locales. Alquilar la maquinaria de construcción también puede tener numerosas ventajas. Por ejemplo, el alquiler de un camión con plataforma o similares, de las excavadoras y/o de los tractores, podría suponer un ahorro considerable frente a la compra o a un renting a largo plazo.

3. ¿Cómo y dónde buscar el terreno?

Una vez que sabes cuánto es el presupuesto máximo que puedes destinar a la compra del terreno, puedes empezar a buscar a través de inmobiliarias que te asesoren, periódicos locales y sitios en internet que se especializan en la venta de propiedades.

Otra forma efectiva de realizar la búsqueda es recorrer personalmente las zonas que te resultan atractivas para poder visualizar las características de los terrenos disponibles a la venta.

4. ¿Cuáles son las características de la zona geográfica?

Es fundamental que reconozcas la zona en la que se encuentra el terreno de tu elección y sus características. Su nivel de accesibilidad, los servicios con los que cuenta (agua, alcantarillado, electricidad, gas) así como las características del suelo y cómo se comporta con respecto a las lluvias o sequías y si requiere de mejoras previas para iniciar las obras.

También debes hacer un reconocimiento de cuanto rodea al terreno, como fábricas, clubes nocturnos, depósitos o vertederos, para determinar la calidad del aire y los potenciales ruidos. Un nuevo parque al final de la calle puede aumentar el valor de las propiedades en los próximos años, mientras que es menos probable que lo haga una nueva carretera o una planta de tratamiento de aguas residuales.

5. ¿Cuál es la situación legal?

Es fundamental que tengas toda la información sobre la situación legal del terreno. Para ello debes buscar el asesoramiento de un abogado o especialista en el tema que te ayude a verificar que no haya hipotecas o impuestos pendientes y que las medidas de la propiedad coincidan con las que figuran en la escritura.

En síntesis, si deseas cumplir el sueño de tu casa propia o de inversión inmobiliaria, la anticipación y previsión de estos factores te permitirá obtener planes de pago mucho más concisos y te habilitará a mejores opciones de créditos hipotecarios.