La nueva normativa europea de protección de datos, relacionada con el sector sanitario, debido a que maneja información altamente sensible sobre sus pacientes, ha de cumplir una serie de requisitos de obligado cumplimiento como son, entre otros, el tener que contar con el consentimiento explícito y por escrito del ciudadano para el tratamiento y uso de informes e historias clínicas y garantizar la confidencialidad de los mismos.