Los altos precios que se están viendo en los mercados eléctricos de Europa, y que están afectando a los consumidores, tienen una parte importante de su origen en la escalada de los precios de los derechos de emisión de CO2. Este mercado de CO2 está regulado por la Unión Europea y ésta tiene la capacidad de hacer bajar los precios sin tener que poner en riesgo la transición energética. Esta opinión es compartida por Antonio Hernández García, Partner for Regulated Sectors and Economic Analysis en EY. id:75736