Las proyecciones de la consultora IDC apuntan que los niveles anuales de generación de datos habrán excedido los 175 Zettabytes en 2025. id:66882
Durante 2021 el almacenamiento y el acceso a datos seguirá incrementándose drásticamente lo que garantiza que los discos mecánicos (HDD) jueguen un papel fundamental el año próximo por la alta capacidad de producción de este tipo de dispositivos, su precio más competitivo y las innovaciones en desarrollo.
Esta es una de las tendencias que marcará el mundo del almacenamiento durante el nuevo año de acuerdo con Toshiba Electronics Europe GmbH, una de las empresas líderes de esta tecnología. Según Toshiba, las expectativas depositadas en la tecnología de almacenamiento de datos son mayores que nunca y sobre todo en los discos HDD frente a la tecnología SSD. Así, y según Rainer W. Kaese, senior manager de desarrollo de negocio HDD de la división de Productos de Almacenamiento de Toshiba, “incluso en el caso de cumplirse las estimaciones más ambiciosas de producción futura de SSD, esta tecnología de almacenamiento sólo representará una fracción de la capacidad total necesaria”.
De hecho, el consumo de datos ya se encuentra mucho más allá de lo que se había imaginado en el pasado y así lo constata la consultora IDC, cuyas proyecciones apuntan que los niveles anuales de generación de datos excederán los 175 Zettabytes en 2025.
La evolución del mercado impulsa la demanda
Los cambios en la cultura laboral que han tenido lugar en los últimos 10 meses, con un porcentaje mucho mayor de población teletrabajando, han acelerado la migración a servicios basados en la nube. Esta situación está ejerciendo más presión en la infraestructura de los centros de datos existentes que, al mismo tiempo, también está evolucionando.
La tecnología basada en cloud plantea nuevos desafíos en materia de tecnología de almacenamiento, base de las operaciones en los centros de datos y requiere soluciones optimizadas que cumplan con los modelos de acceso, así como los requerimientos marcados en términos de rendimiento y fiabilidad.
A esta evolución en el sector de los centros de datos se suma el despliegue de la Internet de las Cosas (IoT), que está comenzando a escalar de forma notable. Las estimaciones sobre el número de nodos conectados en los próximos años varían, pero Juniper Research predice que podrían sobrepasar los 83.000 millones a mitad de la década. Además, apuntan los expertos de Toshiba, para que IoT prevalezca, los costes han de ser lo más bajos posibles, especialmente desde la perspectiva del almacenamiento de datos.
En estrecha relación con el avance de IoT, Toshiba también apunta al mayor interés en la Industria 4.0 como uno de los factores impulsores del despliegue de mayor capacidad de almacenamiento en el sector de la fabricación. La tecnología IoT también va a ser aprovechada por el sector de las utilities y las administraciones públicas para desarrollar y beneficiarse de las funciones propias de las ciudades inteligentes (gestión del tráfico, control de la contaminación, etc.) con la sostenibilidad como principal objetivo.
Al igual que ocurrirá con la Industria 4.0, esta evolución tendrá como resultado la generación de enormes volúmenes de datos por parte de un número de sensores cada vez más importante. Ante las limitaciones de la reserva de capacidad de almacenamiento in situ y de disponibilidad de capacidad de proceso, estos datos generalmente se enviarán a servidores en la nube para su análisis posterior, donde nuevamente serán necesarios recursos de almacenamiento de datos efectivos en coste. Por último, hay que tener en cuenta el impacto en la necesidad de capacidad de almacenamiento del uso cada vez más generalizado de sistemas de vigilancia y de los vehículos autónomos.
El factor coste
Todos los casos de uso mencionados exigen un incremento sustancial de la capacidad de almacenamiento y con la mínima inversión financiera. En este sentido, y aunque la capacidad de una sola unidad SSD supera la de una unidad HDD, en el tipo de aplicaciones citadas no se trata de una cuestión de unidades discretas, sino de soluciones a gran escala, y la configuración de múltiples HDD permite lograr cifras de IOPS muy elevadas sin dejar de resultar extremadamente viables desde una perspectiva económica.
En el análisis del medio de almacenamiento más adecuado, el factor precio/GB es habitualmente la principal preocupación y aunque el coste de los SSD se ha reducido, siguen estando en un orden de magnitud más elevado que los HDD. Además, los avances en el diseño de estos últimos se traducen en ahorros de costes adicionales.
Cabe señalar que el almacenamiento en cinta también jugará su papel puesto que sigue siendo el medio más económico desde la perspectiva del coste por capacidad, pero la cinta no compite directamente con la tecnología de disco duro ni la tecnología flash, dado que mientras que todos los medios mencionados son on-line, la cinta no lo es.
Desde el punto de vista de la ingeniería, Toshiba pone el acento en el progreso continuo de las unidades rellenas con helio y en la evolución continua de tecnologías de nueva generación como la grabación magnética asistida por calor (HAMR) y la grabación magnética asistida por microondas (MAMR), gracias a las cuales existe la posibilidad de incrementar las capacidades de almacenamiento sin aumento de los costes.
En ese escenario, Toshiba considera que la brecha entre el coste de implementación HDD y SDD seguirá siendo considerable durante mucho tiempo, tanto como el dominio de los HDD en el mercado total en términos de capacidad de almacenamiento online desplegada.