Hace siete meses que Reino Unido camina por libre, al margen de la UE y de todos los antiguos compromisos con el continente, incluidos los laborales. id:73952
Desde el pasado 1 de enero, una vez finalizado el periodo transitorio establecido en el Acuerdo de Retirada, Reino Unido ya no forma parte de la Unión Europea. Aparte de las profundas modificaciones relativas a las relaciones internacionales y comerciales, las condiciones para acceder al
mercado laboral británico (tan apetecible para muchos europeos) ya no son tan sencillas. Vamos, que se acabó la libre circulación para los ciudadanos de la UE.
No obstante, pese a los efectos y dificultades inherentes al Brexit y la pandemia (que también), trabajar y vivir legalmente en Gran Bretaña no es un imposible. Como señala Javier Bermúdez, fundador de trabajarporelmundo.org, consultory especialista en negocios online, la digitalización ofrece actualmente un sinfín de posibilidades para emprender, optimizar los tiempos, elegir la manera de trabajar e, incluso, hacerlo desde o para compañías ubicadas en el extranjero (también en UK, of course).
Centrándonos en Reino Unido, la nueva situación derivada de su salida de la Unión Europea y las barreras adicionales a la movilidad de ciudadanos y trabajadores afectan fundamentalmente a quienes ingresen en el país con posterioridad al 1 de enero de 2021, pues las personas que lo hacían anteriormente (los pre-settled, como dicen por allí) pueden continuar viviendo en el país bajo condiciones muy similares a antes del Brexit.
Requisitos para trabajar en Reino Unido tras el Brexit
Los trabajadores cualificados necesitan un visado (basado en un sistema de puntos) que implica obtener una oferta de trabajo avalada por el Ministerio de Interior, un salario superior a 26.500 libras (unos 29.000 euros) y un nivel de inglés equivalente al B1 –como mínimo–, además de un saldo de, al menos, 1.270 libras disponibles en la cuenta bancaria. Esta visa alcanza un máximo de cinco años de duración.
Los trabajadores del sector sanitario lo tienen algo más fácil: una oferta de empleo del Servicio Nacional de Salud (NHS) y hablar inglés bastan para establecerse en UK, familia incluida. Las autoridades facilitan una entrada rápida al país, con tarifas reducidas en la visa y exención del pago del recargo de Salud de Inmigración.
La Visa Talent Global (talento global) supone otra oportunidad para vivir y trabajar en Reino Unido prescindiendo de una oferta laboral. Científicos, investigadores, ingenieros, profesionales de disciplinas artísticas y humanidades (pintura, escultura, literatura, cine, diseño, arquitectura…) con cierto reconocimiento pueden instalarse sin necesidad de tanta exigencia burocrática.
Para obtener el visado correspondiente, los estudiantes únicamente precisan haber sido aceptados en un determinado programa académico, poseer un nivel de inglés adecuado (B2 mínimo) y tener la nota suficiente en Bachillerato. Si se trata de un máster, será necesario acreditar la nota de la formación universitaria.
Existen igualmente rutas alternativas para la obtención de un visado de trabajo como los de puesta enmarcha e innovadores (Start-up and Innovator) y otras profesiones especializadas: ministros de la religión, deportistas y creativos.
Claro que, como comentábamos al principio, la digitalización lo cambia (casi) todo. Salvo el requisito imprescindible de demostrar un nivel de inglés mínimo para no andar a por uvas por el territorio británico y un estatus económico que garantice cierta independencia de las arcas públicas, establecerse por libre en las islas es un reto de lo más tentador y Londres se lleva la palma.
Nómadas digitales, el mundo es vuestra oficina y Londres un excelente lugar para establecer el campamento base
Londres es una de las mejores ciudades del mundo para trabajar como nómada digital. ¿Por qué? Son muchas las razones que llevan a los jóvenes (o no tanto) a emprender o desarrollar su trabajo de manera independiente en la capital británica. Entre otras las oportunidades de aprender, viajar o mejorar el nivel de inglés, además de los grandes atractivos de su cultura urbana: museos, teatro, arte, ocio… La ciudad cuenta con muchísimos espacios de coworking donde trabajar de manera remota sin complicaciones.
Este tipo de trabajo es ideal para profesionales del diseño gráfico y desarrollo web, fotógrafos, cámaras y editores de vídeo, expertos en SEO/SEM, traductores o redactores. También los profesores pueden encontrar un filón en el trabajo a distancia, sobre todo los de idiomas.
Viajar seguro, trabajar seguro
Aunque no sea obligatorio viajar con seguro a la mayoría de destinos internacionales, el Ministerio de Asuntos Exteriores aconseja contratar un buen seguro de viaje que incluya, si es posible, asistencia sanitaria universal, especialmente cuando en el país de destino la asistencia médica tenga un coste elevado. En el caso británico, puede ser una garantía adicional al acceso a su sistema sanitario, aunque no libere del nuevo recargo a la inmigración.
¿Qué pasa con el coronavirus? Actualmente la mayoría de estos seguros cubren asistencia en viaje COVID-19: pruebas diagnósticas (PCR), transporte sanitario, asistencia médica, hospitalización, cuarentena y repatriación y anulación en caso de positivo en COVID-19 en España si ello impide viajar en la fecha prevista.
Además, algunas compañías especializadas en viaje ofrecen productos específicos para viajes de negocio, de estudios o prácticas profesionales internacionales con coberturas anuales que también incluyen la práctica de deportes habituales y/o de riesgo.