Lo que falta es voluntad política porque este es un status quo muy cómodo tanto para el ministro como para las OPAs que no quieren elecciones: “se les debería caer la cara de vergüenza a todos”. id:76358
Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, que ha entregado su documento de alegaciones en tiempo y plazo sobre la apertura de una “reflexión sosegada” para encarar la modificación o sustitución de la vigente ley de representatividad agraria, insta al Ministerio a no demorarse más en el proceso que lleva evadiendo desde que se formara el Gobierno, al igual que hizo su antecesora en el cargo, García Tejerina.
Unión de Uniones considera que el actual marco institucional de interlocución niega el derecho a los agricultores a elegir a sus representantes, impide acceder a la condición de “más representativa” a cualquier organización que legítimamente aspire a ello e ignora, además, el paisaje de respaldo real que tienen las OPAs en el campo.
La organización recuerda que el equipo ministerial anterior, encabezado por García Tejerina, dispuso de cuatro años para convocar elecciones en el campo y que Planas ha tenido otros tres; pero “han preferido mantener una interlocución zombie, basada en una ley que se derogó, precisamente, porque no servía para medir objetivamente la representatividad agraria”.
La organización propone un proyecto de ley que, modificando la vigente, fije calendario para la celebración de elecciones en el nivel estatal para que voten los profesionales del sector y que se coordine con las consultas autonómicas. Además, el marco institucional actual debe acomodarse hasta entonces a la realidad del sector incluyendo a todas las OPAs que han obtenido resultados apreciables en las consultas autonómicas celebradas.
Unión de Uniones cuenta casi con el 30% de los votos emitidos en las elecciones territoriales
Desde la entrada en vigor de la Ley 12/2014, que venía a decir que se debía aclarar el proceso representativo y que lleva en el tintero desde hace 7 años, se han llevado a cabo varios procesos electorales autonómicos.
Concretamente los gobiernos que, en el ejercicio de sus competencias, han decidido convocar elecciones para dirimir la representatividad agraria en sus ámbitos territoriales, han sido Cataluña, Madrid, Castilla y León y Extremadura. Unión de Uniones señala que estas son CC.AA que realizan estos procesos de forma recurrente y que, en el caso de Cataluña en 2021, han utilizado un procedimiento telemático que simplifica el sistema y abarata sus costes.
Concretamente, las excusas acerca del coste, la necesidad de medios y la complejidad de la consulta son algunas de las excusas del Ministerio para evitarlas, pero nunca han sido justificadas por estudios o informes que hayan sido presentados. Unión de Uniones considera que lo que falta es voluntad política porque este es un status quo muy cómodo tanto para el Ministro como para las OPAs que no quieren elecciones: “se les debería caer la cara de vergüenza a todos”.
La organización destaca que el censo conjunto de las cuatro elecciones regionales convocadas suma un total de 76.648 electores. Ello supone, aproximadamente, un 30 % de titulares de explotaciones agrarias en España que están inscritos en el correspondiente régimen de la Seguridad Social en función de su actividad agraria. Aun teniendo en cuanta el ámbito territorial de estas consultas, una cifra próxima al 30% nacional puede y debe considerarse una muestra suficientemente característica del paisaje de representatividad agraria.
Teniendo en consideración los resultados obtenidos, Unión de Uniones cuenta con un apoyo nada despreciable e incluso bastante por encima de dos de las organizaciones (UPA y COAG) que hoy detentan la condición de “más representativas”. Los porcentajes de votos con el que cuentan cada una de las organizaciones agrarias son: ASAJA el 38;6 %: Unión de Uniones el 29,2 %: UPA el 17,6 % y COAG el 14,6 %.
La organización exige que se resuelva la situación, que la de la democracia llegue al campo y no parará hasta conseguirlo, trabajando por los intereses de los agricultores y ganaderos de una manera objetiva y neutral como ha hecho hasta ahora.
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