En su primera intervención incide en la necesidad de “superar los intereses particulares y partidistas y colocar los intereses generales por encima de cualquier otra consideración”. id:60250
Victoria Plantalamor Contreras (Madrid, 1971), vicepresidenta y consejera delegada del Grupo Industrial Crimidesa, ha sido nombrada presidenta de la Asociación de la Empresa Familiar de Madrid (ADEFAM) en su XVII Asamblea General de Socios, cuya reunión se ha celebrado hoy por vía telemática.
La nueva presidenta de ADEFAM, que permanecerá en el cargo por un periodo de tres años, sucede a Alberto Zoilo Álvarez, presidente del Grupo Antonio Álvarez, que ha estado al frente de la asociación desde 2017.
La Asociación de la Empresa Familiar de Madrid reúne a más de un centenar de empresas familiares madrileñas, que dan empleo a más de 240.000 trabajadores y cuya facturación agregada se sitúa en torno a los 16.000 millones de euros, el equivalente al 7,78% del PIB de la Comunidad de Madrid.
Victoria Plantalamor se incorporó a Crimidesa como consejera en 2003 y en 2017 fue nombrada consejera delegada. La compañía, fundada en 1954 por sus abuelos, emplea actualmente a más de 200 trabajadores, y su actividad principal es la extracción y tratamiento industrial del sulfato de sodio para su empleo en la fabricación de detergentes en polvo. Crimidesa está considerada como la mayor empresa fabricante europea de su sector, con un 95% de su producción destinada a la exportación.
Victoria Plantalamor es Ingeniera de Minas por la Universidad Politécnica de Madrid y cuenta con un máster MBA por la escuela de negocios internacionales Thunderbird, de Estados Unidos. Actualmente, está siguiendo un Programa de Alta Dirección de Empresa en el IESE.
Poner en primera línea la acción de la sociedad civil
En su primera intervención ante los socios, en presencia del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y de otros altos cargos de la administración municipal y autonómica, la nueva presidenta de ADEFAM aseguró que, ante la excepcionalidad que España está viviendo en el plano social y económico, “debemos poner en primera línea la acción de la sociedad civil para enfatizar sobre asuntos que, aunque obvios, tienen que ser recordados”.
A este respecto, señaló que “resulta desalentador que las recetas del gobierno sean el aumento el gasto corriente, y que la fuente de ingresos para sostener el gasto sea el aumento de la presión impositiva hacia ciudadanos y empresas mediante incrementos del IVA, IRPF y Sociedades por la vía de suprimir deducciones y exigir adelantos a las empresas en su liquidación de impuestos”.
Asimismo, al tiempo que incidió en la necesidad de garantizar la liquidez de las empresas, recordó que “no es el momento de derogar la reforma laboral, ni de legislar en contra del teletrabajo que ha sido vital para poder sobrevivir estos meses”, y reivindicó un “marco regulatorio estable y coherente con los tiempos difíciles que hemos de afrontar, que favorezca la inversión”.
La nueva presidenta de ADEFAM subrayó también la importancia de cuidar el sector industrial, “tan importante para el progreso de un país, que ha sido largamente castigado por políticas energéticas ineficientes que lastran y restan competitividad a un sector que genera empleo de calidad. Evidentemente, si el turismo o la industria están en crisis, el sector servicios lo sufre en igual o peor medida”.
Exhortó a la colaboración del Gobierno, los partidos políticos y los agentes sociales en tono a un mismo objetivo. “Es momento de superar los intereses particulares y partidistas y colocar los intereses generales por encima de cualquier otra consideración. Para ello necesitamos amplios consensos con las formaciones políticas y con todas las partes implicadas, entre ellas, y muy especialmente, los empresarios”, dijo.
Cuidar el tejido productivo para asegurar los servicios públicos
La nueva presidenta de ADEFAM, reclamó de las autoridades la puesta en marcha de “marcos jurídicos estables, que proporcionen certidumbre y unas condiciones favorables para la inversión”, al igual que el diseño de planes a largo plazo que den respuesta al desafío de la tercera revolución industrial, que estará marcada por la robotización y la inteligencia artificial.
Sobre el papel de la empresa familiar en la economía, Victoria Plantalamor recordó que la empresa familiar representa en su totalidad el 90% del tejido productivo y el 67% del empleo privado, y que “son las empresas, la iniciativa privada, con su capacidad de crear empleo y riqueza, las que pueden garantizar unos servicios públicos sostenibles y de calidad. Lo contrario, apostar por lo público sin cuidar y fomentar el tejido productivo, constituye el camino más rápido para sumirnos en el retraso y la pobreza”.
Finalmente, alabó la “extraordinaria movilización” de las empresas familiares en toda España en torno a movimientos como Esto no tiene que parar o campañas como Damos la cara, para mostrar su compromiso y solidaridad con la sociedad para dar respuesta a la crisis sanitaria y económica.
“Por difíciles que sean las circunstancias imperantes, siempre habrá personas inconformistas como vosotros que no se resignan a vivir bajo las condiciones que les fueron dadas y que tratan de transformarlas. Por eso soy optimista, y por eso, como vosotros, soy empresaria. Consciente en todo momento del compromiso que hemos adquirido con nuestros empleados y clientes, con el territorio en el que estamos asentados y con nuestras familias”, concluyó.